Hace un par de semanas os hablaba de las ventajas y maravillas de mantener un blog. Solo hay un problema, mantener significa escribir, y para los que no somos de letras, esto significa un esfuerzo añadido. Normalmente el consejo que todo el mundo da es: para aprender a escribir hay que escribir y leer. Personalmente a mí esto no me ha valido para mucho! En cambio aquí os dejo un par de consejos que en cambio sí me han venido bien:
- Escribir sobre UN tema en bruto y desarrollarlo de corrida. A modo brainstorming.
- Cuando pongo UNO, me refiero a un solo tema, no desparramarse e ir saltando de un tema a otro.
- Probablemente, en la siguiente edición no quede nada de este material inicial. Pero este método sirve para desbloquear.
- Comenzar apelando a la experiencia, engancha al lector.
- Tamaño máximo de la entrada media página, a partir de ahí empieza a hacerse pesado.
- Usar lenguaje corto y fácil. Ayuda a mantener al lector enganchado.
- Aportar pensamientos diferentes y genuinos.
- Buscar un estilo propio, ni muy cargado y pedante, ni muy soso y aséptico. En la mesura está el acierto.
- Dar un toque provocador.
- Y sobre todo el rematar el final, el tamaño tweet es correcto.
- Creo que la parte de una foto ilustrativa y el título con gancho, no necesitan mención.
Parerga y paralipómena son escritos filosóficos menores en griego. Y yo la verdad, que en mi blog no me atrevo a ir más lejos!