Llevo una semana con una canción en la cabeza, la Despechá de la Rosalía, oah alocá, y no hay manera de quitármela de la cabeza, es curioso cómo algunas cosas se enganchan en nosotros. Casi tanto como Twitter se le ha enganchado a Elon Musk. El cual por fin finalizó hace un par de días su compra y tomó asiento en su sillón de CEO con el consabido despido de Parag Agrawal. Éste ha sido el primero de los muchos cambios que nos esperan. Elon tiene varios frentes abiertos: las cuentas falsas y el control de contenidos, y el modelo de negocio, en este último la gran duda es si irá por el camino de la publicidad o por el modelo freemium.
Mientras, en este día de medio puente, yo aquí sigo enchufá al buen rollito de la Rosalía, y que no tiene razón de ser porque según Xataka: la negatividad vende más, por eso las canciones cada vez son más tristes y depresivas; un efecto de los tiempos…